Believe - Rev. Grace Reyes
Imagine being in a situation in which you feel there is no way out and there is a friend, family member whom you love, encouraging you to wait, to wait on the promise of the Lord. You wring your hands in anguish, forlorn and eyes downcast. The Lord uses this person to tell you that He is there, that the enemy, mountain or giant you are facing today, you will see no more!
How many times we have been there, in our desert places waiting for the answer from God that He will sustain us, keep us and we cannot muster up the strength to even move out of our own way. Our enemy whispers discouragement and defeat and we incline our ears to listen intently nodding our heads and believing the lie.
I encourage you to read the above reassurance from the mouth of the man who touched the waters of the sea, and it obeyed him, not because of who he was, but who the God he served was. Be encouraged today as you read on that God sees us in our waiting, He says to you, yes there will be trials and more than enough tribulations but suddenly, the giants, the suffering you see today you will see no more!
Dare to speak into your situation, that what you see in the name of Jesus will be no more, no more suffering over a situation that you have given over to God and He is more than able. Sickness, nothing is too hard for Him, salvation for your children His promise is sufficient. Whatever you are facing today, speak to it with authority and faith that what you are looking at in the natural is being worked on in the supernatural. 2 Timothy 1:7 says, “For God has not given us a spirit of fear, but of power and of love and a sound mind”. I rest on this today.
CREER- Rev. Grace Reyes
“Entonces Moisés dijo al pueblo: “¡No tengan miedo! Manténganse firmes [estén firmes, confiados y sin desmayar] y vean la salvación del SEÑOR que Él llevará a cabo hoy para ustedes; porque a esos egipcios que has visto hoy, no los volverás a ver.
Éxodo 14:13 AM
Imagina estar en una situación en la que sientes que no hay salida y hay un amigo, un familiar a quien amas, animándote a esperar, a esperar en la promesa del Señor. Te retuerces las manos en la angustia, desamparado y con los ojos bajos. El Señor usa a esta persona para decirte que Él está allí, que el enemigo, montaña o gigante al que te enfrentas hoy, ¡no lo verás más!
Cuantas veces hemos estado ahí, en nuestros lugares desérticos esperando la respuesta de Dios de que Él nos sostendrá, nos guardará y no podremos reunir fuerzas ni para salirnos de nuestro propio camino. Nuestro enemigo susurra desánimo y derrota y nosotros inclinamos nuestros oídos a escuchar atentamente asintiendo con la cabeza y creyendo la mentira.
Los animo a leer la seguridad anterior de la boca del hombre que tocó las aguas del mar, y le obedeció, no por quién era él, sino por quién era el Dios a quien servía. Anímate hoy mientras lees que Dios nos ve en nuestra espera, Él te dice, sí, habrá pruebas o más que suficientes tribulaciones, pero de repente, los Gigantes, ¡el sufrimiento que ves hoy no lo verás más!
Atrévete a hablar de tu situación, que lo que ves en el nombre de Jesús no será más, no más sufrimiento por una situación que le has entregado a Dios y Él es más que capaz. Enfermedad, nada es demasiado difícil para Él, salvación para tus hijos Su promesa es suficiente. Lo que sea que estés enfrentando hoy, háblalo con autoridad y fe de que lo que estás viendo en lo natural se está trabajando en lo sobrenatural. 2 Timoteo 1:7 dice: “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”. Descanso en esto hoy.