“And He said to them, “I saw Satan fall like lightning from heaven, Behold, I give you the authority to trample on serpents and scorpions, and over all the power of the enemy, and nothing shall by any means hurt you. Nevertheless, do not rejoice in this, that the spirits are subject to you, but rather rejoice because your names are written in heaven”

Luke 10:18-21

Scripture & Prayer Submitted by: Renita Morriar

"Jesus & His Resurrection"

WHEN JESUS IS IN THE ROOM (OF OUR HEART) THERE IS NO ROOM FOR PRIDE

Heavenly Father, glorious redeemer, and savior of our souls. Lord, we thank you for the privilege and honor to be called your own, to be called your people and the sheep of your pasture (Psalm 100:3). Thank you, Abba Father, for trusting us and investing the very same power that raised Jesus from the dead inside of us. It is a mystery and indescribable treasure and story of love.

Lord, we come before you today as your children. Your word says that you resist the proud and exalt the humble (James 4:6). So, we come humbly before you today, reminded of our frailties and weaknesses. Strengthen us Lord. Keep us vigilant and sober minded, NOT TO BE HEAD STRONG. Help us to resist the temptations of this world, and to never allow pride and self-exultation to rule and occupy our hearts.

"Commit to the LORD whatever you do, and your plans will succeed." (Proverbs 16:3)

In Jesus' name.

Amen

“Y les dijo: Vi a Satanás caer del cielo como un rayo. He aquí, os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo el poder del enemigo, y nada os dañará. Sin embargo, no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos”

Lucas 10:18-21

Escritura y Oración Enviado por: Renita Morriar

"Jesús y su resurrección"

CUANDO JESÚS ESTÁ EN LA SALA (DE NUESTRO CORAZÓN) NO HAY LUGAR PARA EL ORGULLO

Padre celestial, glorioso redentor y salvador de nuestras almas. Señor, te damos gracias por el privilegio y el honor de ser llamados tuyos, de ser llamados tu pueblo y las ovejas de tu prado (Salmo 100:3). Gracias, Abba Padre, por confiar en nosotros e invertir el mismo poder que resucitó a Jesús de entre los muertos dentro de nosotros. Es un misterio y un tesoro indescriptible y una historia de amor.

Señor, venimos ante ti hoy como tus hijos. Tu palabra dice que resistes a los soberbios y exaltas a los humildes (Santiago 4:6). Así que hoy venimos humildemente ante ti, recordando nuestras fragilidades y debilidades. Fortalécenos Señor. Manténganos vigilantes y de mente sobria, PARA NO SER FUERTES DE CABEZA. Ayúdanos a resistir las tentaciones de este mundo y a nunca permitir que el orgullo y la exaltación propia dominen y ocupen nuestros corazones.

"Encomienda al Señor todo lo que hagas, y tus planes tendrán éxito". (Proverbios 16:3)

En el nombre de Jesus.

Amén

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